Revestimiento y pavimento
Estas son las características de dos conceptos básicos en el mundo de la cerámica.
Si tienes prevista una nueva obra o una reforma de un espacio existente y quieres utilizar cerámica, antes de empezar debes tener claras las diferencias entre el revestimiento y el pavimento para elegir los productos más idóneos para tu proyecto y no arrepentirte luego de la decisión. Tener claro para qué vamos a utilizar cada material es fundamental para garantizar un buen uso y un mantenimiento perfecto.
En términos generales, podemos decir que el revestimiento es la pared y el pavimento es el suelo, pero hay muchos matices que los convierten, a veces, en materiales totalmente diferentes. Al fin y al cabo, el uso que se da a las paredes y los suelos de una casa también es completamente distinto.
- El revestimiento lo conforma la pared vertical de nuestros proyectos y, como ocurre con el pavimento, también puede fabricarse con distintos materiales (pasta blanca o pasta roja) y acabados (natural, brillo, mate…), en función de los efectos que se deseen conseguir y la textura que quiera reproducir esa colección.
- El pavimento, por su parte, es lo que se utiliza para cubrir el suelo de cualquier casa o establecimiento. En función de los materiales y sus características podemos encontrar diferentes tipos de suelos: para interior, para exterior, antideslizante, de alto tránsito, resistente a heladas… Todo depende del uso que vayamos a darle, de dónde lo vayamos a colocar y de la resistencia que necesitemos.
Pero no solo su uso es diferente. Con frecuencia, las características técnicas de uno y otro difieren entre sí, ya que el pavimento requiere más resistencia al impacto que el revestimiento y por tanto, su proceso de fabricación es diferente.
Materiales más resistentes van a necesitar mayores temperaturas de cocción para garantizar esa durabilidad y resistencia.
Lo habitual es que los suelos sean cuadrados o rectangulares, de mayor o menor tamaño, mientras los revestimientos suelen ser rectangulares y cuentan con piezas decorativas para hacerlos más versátiles y más atractivos para proyectos de decoración. Aun así, también los formatos pueden variar. De hecho, en los últimos años la proliferación de tamaños de baldosas cerámicas ha sido enorme y es habitual ver piezas de diferentes tamaños combinadas entre sí.
¿Sabías que también hay materiales que resultan aptos tanto para pavimentos como revestimiento? Es el caso de la mayor parte de colecciones de gres porcelánico, que resultan idóneos para su uso en suelos, pero se adaptan perfectamente a paredes y permiten crear espacios armónicos y con continuidad visual.
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